Tiempo de cuidar y restaurar
Hay varios arbolitos afectados desde hace años por el tizón, así que le consulto a mi amiga Mar Alonso, especialista botánica y antigua compañera de estudios, sobre un tratamiento contra esta plaga vegetal, y ella me proporciona los ingredientes (cobre y aceite) y la receta para fumigar. Una soleada mañana de final de invierno me voy a las Presillas con 2 litros del preparado y se lo aplico en la superficie de hojas y ramas a los Quercus ennegrecidos por el hongo. Esperemos que se recuperen💪🌳🌳🌳
Poco antes de primavera se repite la pesadilla del desbroce de temporadas anteriores. Este año las cuadrillas han realizado los trabajos prematuramente y sin poner suficiente atención y la consecuencia ha sido 8-9 arbolitos lesionados o directamente masacrados. Así que me comunico con la directora técnica de Parques y Jardines, que quedó en avisarme, que me dice que lo lamenta mucho y nos proponemos que no vuelva a suceder.
En los días siguientes me dedico a restaurar los árboles heridos y a sustituir tubos protectores; el capataz de los jardineros me llama y quedamos un día en el lugar para comentar los daños y poner los medios para prevenirlos en el futuro. Uno de los árboles dañados es el único roble introducido en las Presillas (hasta el momento 😏) que tiene un severo mordisco en la base del tronco, aunque no parece afectar a su vigor y crecimiento.
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